El sol duerme tranquilamente
Una vez en un siglo que fue
Océanos deseosos de calma y calor
Ardientes caricias enterradas.
Para mis sueños tengo mi vida
Para los deseos observo mis noches
La verdad al final de los tiempos,
Perder la fe es cometer un crimen.
Deseo que esta noche
Dure una eternidad.
La oscuridad a mi alrededor
Como la orilla de un mar solar.
Oh, cuánto deseo caer con el sol
Durmiendo
Llorando
Contigo
El dolor tiene un corazón humano
Que de mi dios se alejará.
He surcado miles de lunas
Sin nunca encontrar a dónde ir.
Doscientos veintidós días de luz
Serán deseados por una noche,
Un instante para la obra del poeta
Hasta que ya no quede nada que decir.
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